Las Cosas que No Dije #4

Extraño aquel lejano sentimiento que aún me amarraba contigo adentro.

Extraño el enorme nerviosismo que sentía al caminar por esas puertas vacías y sabía que una de ellas me daría de nuevo la vida.

Vivir para los lunes era hermoso y escuchar tu voz en mi días lo convertían todo en glorioso.

Pero hoy sé que todo aquello se reduce al olvido, al odio retenido.

No puedo aunque quiero hablar de amor contigo.

Estoy encerrada nuevamente en la misma habitación donde solía imaginar tu vida junto a la mía, ahora sé muy bien que es lo que me retenía, es estar en el mismo lugar sin el sentimiento de la carne que me carcome por dentro.

Es tener la terrible sensación de sentirme burlada.

Es la sensación de deseos de venganza son las ganas de no sentirme tan tonta, ni tan vulnerada.

Es querer ganar la batalla contra un fantasma.

Pero sé lo que quiero exactamente quiero ir donde ella y decirle una verdad que me mata.

Que él me hablaba, que me contaba cosas que quizás ella nunca soñara si quiera alguna vez escuchar.

Que él se sentía más vivo conmigo de lo que tu incluso nunca podrías lograr aún si lo intentaras.

Que él realmente  está contigo por lo años de nostalgia y no porque tu en verdad seas su verdad su verdadera dama.

Finalmente ya sé que parece que yo en verdad estoy perdida que no me queda nada más que una pena confundida pero déjame recordarte querido ex amante  que nunca fuiste ni serás algo más, siempre seras esto. Las cenizas de un amor que fue y que quiso ser pero nunca más renacerá y que a pesar de todo me quedan más hojas para llenarlas con nuevos nombres y pasiones de las que tú nunca ni en sueños estuviste cerca.